Muchos autónomos atraviesan momentos económicos complicados y se ven obligados a replantearse su situación. Una de las preguntas más comunes en estos casos es si pueden darse de baja del régimen de autónomos (RETA) aunque tengan deudas pendientes. En este artículo, desde Amagna te explicamos qué dice la ley, qué consecuencias conlleva y qué opciones tienes para protegerte legalmente.
¿Es legal darse de baja como autónomo si tienes deudas?
Baja en el RETA con deudas pendientes
La respuesta es sí, puedes darte de baja como autónomo incluso si tienes deudas con la Seguridad Social o Hacienda. No existe ningún impedimento legal que lo prohíba, ya que la baja en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos) es un trámite administrativo independiente de tu situación de pagos. Sin embargo, la deuda no desaparece, y seguirás siendo responsable de abonarla tras el cese de actividad.
Eso sí, debes tener en cuenta que mientras sigas dado de alta, seguirás generando nuevas cuotas mensuales, lo que agrava la situación. Por eso, si ya no tienes actividad profesional ni ingresos, es recomendable tramitar la baja lo antes posible para evitar el incremento de la deuda.
Consecuencias de darte de baja con deudas
Darte de baja con deudas pendientes no te exime del pago de las cantidades adeudadas, y tanto la Seguridad Social como Hacienda pueden iniciar procedimientos de recargo o embargo si no regularizas tu situación.
Además, si tu deuda es con la Seguridad Social, puede generarte problemas a medio plazo: no podrás acceder a ciertas ayudas o bonificaciones en el futuro, ni darte de alta de nuevo como autónomo sin antes saldar (o al menos fraccionar) la deuda.
A efectos fiscales, también debes estar atento: si tienes deudas con Hacienda, es posible que te incluyan en registros de morosos como el de la AEAT o incluso el CIRBE (Central de Información de Riesgos del Banco de España), lo que podría dificultarte el acceso a financiación o créditos en el futuro. Además, es importante que cierres correctamente tu actividad a nivel fiscal (modelo 036 o 037) para evitar que se sigan generando obligaciones tributarias.
¿Qué pasa con las deudas tras darte de baja?
Seguimiento y recargos por parte de la Seguridad Social y Hacienda
Una vez formalices tu baja como autónomo, las deudas pendientes seguirán activas. De hecho, la Seguridad Social aplicará recargos automáticos si no realizas el pago en el plazo establecido. Estos recargos pueden alcanzar hasta un 20% sobre el importe original, más intereses de demora.
En el caso de Hacienda, el proceso es similar: si no cumples con tus obligaciones tributarias, la deuda puede derivar en embargos de cuentas bancarias, devoluciones de IRPF o incluso bienes, si la cuantía es elevada. No obstante, ambas administraciones ofrecen la posibilidad de solicitar un aplazamiento o fraccionamiento de la deuda, lo que puede ayudarte a gestionarla de forma más flexible.
¿Puedes seguir recibiendo notificaciones y reclamaciones?
Sí, incluso habiéndote dado de baja, seguirás recibiendo notificaciones de embargo, requerimientos de pago o comunicaciones de procedimiento sancionador. Las administraciones pueden iniciar —o continuar— acciones de cobro, y es esencial que estés atento a cualquier notificación electrónica o postal.
Ignorar estas notificaciones puede empeorar la situación: los plazos legales seguirán corriendo, y si no respondes, se considerará que renuncias a presentar alegaciones. Por eso, aunque ya no estés dado de alta, es muy importante contar con el acompañamiento de un abogado que te ayude a responder, negociar o recurrir las medidas que puedan tomarse en tu contra.
Qué opciones tienes si no puedes pagar tus deudas?
Cuando la deuda ya es inasumible o te impide continuar con tu actividad, es fundamental explorar alternativas legales que te permitan salir del bucle sin comprometer tu futuro. Actuar a tiempo puede marcar la diferencia entre una solución viable o un proceso de embargo difícil de revertir.
Negociación o fraccionamiento de pagos
Una de las primeras vías que se deben valorar es la negociación con los acreedores o administraciones:
- Solicitud de aplazamiento o fraccionamiento: Tanto Hacienda como la Seguridad Social permiten dividir el pago de la deuda en plazos mensuales si demuestras que no puedes pagarla de una sola vez.
- Presentación de la solicitud: Se hace a través de la sede electrónica, con un plan de pagos propuesto y documentación justificativa de tu situación económica.
- Requisitos: No tener deudas en procedimiento ejecutivo sin garantía, mantenerte al día en los pagos fraccionados y justificar insolvencia temporal.
- Beneficios: Te permite evitar embargos, ganar tiempo y cumplir poco a poco sin bloquear tus cuentas.
- Negociación privada: En deudas con bancos u otras entidades privadas, también puede plantearse una negociación con apoyo legal para refinanciar o renegociar condiciones.
Ley de Segunda Oportunidad para autónomos
Cuando la deuda supera los 10.000 €, se acumula con el tiempo y no existen ingresos suficientes para afrontarla, la Ley de Segunda Oportunidad puede convertirse en la mejor vía para empezar de cero legalmente.
Esta ley permite a autónomos y personas físicas acceder a un mecanismo de cancelación total o parcial de sus deudas si se demuestra que han actuado de buena fe. Entre los requisitos principales están: haber intentado un acuerdo extrajudicial con los acreedores, no haber cometido delitos económicos y no haberse acogido a esta ley en los últimos 5 años.
Además, en ciertos casos es posible conservar la vivienda habitual, siempre que se cumplan condiciones como estar al día con la hipoteca y que la cuota no sea excesiva en comparación con los ingresos. El proceso se inicia en sede judicial y debe ir acompañado por un abogado y un administrador concursal, pero la posibilidad de exonerar todas tus deudas merece la pena.
¿Por qué es recomendable contar con asesoramiento legal?
Darse de baja como autónomo, negociar una deuda o acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad son procesos con implicaciones legales importantes. Un error en los plazos, documentación o estrategia puede agravar la situación, provocar embargos innecesarios o impedir el acceso a beneficios como la exoneración de deuda.
Contar con el apoyo de un abogado especializado te permite tener una visión clara de tus derechos y opciones, proteger tu patrimonio y trazar un plan legal realista para salir del endeudamiento. En Amagna, analizamos tu caso sin juicios ni tecnicismos, y te acompañamos durante todo el proceso para que tomes decisiones seguras.
¿Eres autónomo y no puedes más con las deudas? En Amagna analizamos tu situación y te ofrecemos soluciones reales para que puedas dar el paso sin miedo. Ponte en contacto con nuestro equipo y empieza a recuperar el control de tu vida.